La piedra que el presidente de Bolivia regaló a Javier Milei
Javier Milei estuvo presente en la asunción de Rodrigo Paz, el nuevo presidente de Bolivia. Durante un encuentro distendido, ambos líderes se mostraron muy cómodos, y eso se reflejó en un regalo especial que Paz le hizo a Milei.
El obsequio fue un mineral llamado “bolivianita”, originario de Bolivia. Milei, entusiasmado, comentó: “Me encanta y encima es de color violeta”. Este color no es casual: representa su partido, La Libertad Avanza (LLA).
El regalo de Rodrigo Paz a Javier Milei
En la ocasión, Paz compartió con una sonrisa: “Poca gente sabe que en Tarija hacemos muy buenos vinos, y además, les traigo un mineral que llamamos bolivianita”. Tras esta frase, le entregaron a Milei la piedra de hermosa tonalidad violeta.
Paz amplió su explicación: “Según el crisol que se le dé, el perfil genera los tres colores.” La bolivianita es una fusión natural de amatista y citrino, que generalmente muestra tonos violetas y amarillos. Milei, mientras celebraba, dijo que el violeta es el color de su partido, añadiendo un toque simbólico a su regalo.
Por el lado argentino, Milei obsequió un bolso de “cuero argentino”, que Paz recibió con respeto y mencionó que lo usarán sus hijas. “Es una belleza, solo que no me da a durar,” comentó entre risas.
En este marco de buena onda, Paz reafirmó su deseo de coordinar una reunión bilateral para retomar una “agenda común” después de las elecciones en Bolivia. Milei respondió: “Sos bienvenido, quedate tranquilo. Que lo coordinen los cancilleres. Va a ser una linda reunión.”
Bolivia celebró la asunción de Paz
Rodrigo Paz Pereira asumió la presidencia de Bolivia con un mensaje de apertura y un enfoque en la reconstrucción política, tras ganar el balotaje con el 54,96% de los votos. Hijo del expresidente Jaime Paz Zamora, nació en España y se presentó como candidato del Partido Demócrata Cristiano. Supo captar apoyos desde el centro y el progresismo, enfrentándose a Jorge “Tuto” Quiroga, de la derecha más conservadora.
Paz, con una sólida trayectoria en el Congreso y como alcalde en Tarija, llegó al poder sin estar en la cima de las encuestas. En su discurso, hizo una promesa significativa: “Este gobierno promete que jamás abandonará la Patria. Comienza un tiempo de la libertad pero también de la responsabilidad”. También hizo hincapié en que “a la libertad hay que cuidarla, por eso la perdimos.”
Con un tono crítico hacia el pasado, el nuevo presidente llamó a dejar atrás el aislamiento internacional y las “ideologías fracasadas.” Desea marcar distancia de los gobiernos anteriores que, según él, dominaban la región en la última década. “Nunca más una Bolivia aislada,” enfatizó.
Paz deberá gobernar hasta 2030 sin contar con una mayoría legislativa, lo cual lo llevará a forjar alianzas para garantizar su gobernabilidad. Además, inicia su mandato en un contexto económico complejo, con inflación superior al 20% anual, una cifra alta para Bolivia, y enfrenta problemas como la escasez de combustibles y una creciente demanda interna de dólares.